Apple ha dado un paso adelante en la tecnología de monitoreo de la salud al desarrollar un sistema que permite medir la transpiración y sudoración de los usuarios durante la actividad física a través de electrodos integrados en el reverso de su popular Apple Watch. La compañía presentó una solicitud de patente ante la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos (USPTO) para este revolucionario sistema, el cual tiene como objetivo evaluar los niveles de hidratación de los usuarios y prevenir posibles problemas derivados de un aumento en la temperatura corporal.
El sistema no solo monitorea la actividad física del usuario, sino que también utiliza los electrodos para medir el sudor generado durante el esfuerzo físico. La conductancia eléctrica de la transpiración puede indicar la concentración de electrolitos y el nivel de hidratación del usuario, factores cruciales que pueden afectar el rendimiento durante el ejercicio y aumentar el riesgo de golpes de calor. Esta innovación es especialmente relevante en la prevención de lesiones y la optimización del desempeño deportivo.
Además, se integra con la función de electrocardiograma (ECG) del Apple Watch a través de un segundo conjunto de electrodos, permitiendo el registro preciso de las pulsaciones del corazón del usuario. La medición del sudor se activa durante las sesiones de ejercicio y puede iniciar automáticamente al detectar movimiento o actividad física, lo que brinda al dispositivo la capacidad de estimar la cantidad de líquido perdido en un período de tiempo determinado.
Esta tecnología pionera en el monitoreo de la salud no solo proporciona datos importantes para la salud y el bienestar del usuario, sino que también se consolida como una aliada indispensable para quienes buscan mantener un estilo de vida activo y saludable, brindando información vital para optimizar el cuidado personal y prevenir posibles complicaciones derivadas del ejercicio físico.
