En los últimos tiempos, el sofá modular ha experimentado un resurgimiento notable, impulsado por factores clave que han transformado tanto su popularidad como su diseño. Este fenómeno se encuentra arraigado en la usabilidad de los espacios actuales, especialmente en el contexto del salón, así como en un renacer estético vinculado al retorno de las tendencias de los años setenta en la decoración.
No obstante, el panorama socioeconómico también ha desempeñado un papel esencial, revelando la creciente dificultad para encontrar viviendas estables.
La pandemia como catalizador de cambios en el hogar
El confinamiento obligatorio llevó a una reevaluación de la distribución y el uso de los espacios, impulsando a la búsqueda de soluciones prácticas y estéticas. Las redes sociales, como Instagram, TikTok y Pinterest, han amplificado este interés, convirtiéndose en fuentes de inspiración y creatividad para millones de usuarios ávidos de transformar sus hogares en lugares más acogedores y funcionales.
Adaptabilidad: el desafío de trabajar y vivir en el mismo espacio
Con la consolidación del trabajo remoto, surgió la necesidad de convertir partes de la vivienda en áreas de oficina o estudio. La fusión de espacios, de manera funcional y estéticamente agradable, se convirtió en un objetivo clave para muchos.
El salón, en particular, se transformó en un escenario multifuncional, como destaca Manuel Delgado, responsable estratégico de interiorismo de Ikea España. Este cambio ha impulsado la evolución del diseño hacia muebles versátiles y modulares, como los sofás Jättebo de Ikea, que permiten adaptar el espacio a diferentes actividades a lo largo del día.
Estilo setentero: la estética que regresa con fuerza
El resurgimiento del estilo de los años setenta ha influido considerablemente en la elección de mobiliario, especialmente en la búsqueda de un ambiente sereno y acogedor. El uso de madera, la presencia de plantas y la preferencia por tonalidades verdes suaves son elementos característicos de esta tendencia.
Marcas como Really Nice Things han incorporado el estilo de los setenta en sus sofás modulares Lea y Harper, fusionando funcionalidad y diseño retro-contemporáneo.
Explorando el pasado: diseños modulares de los años setenta
El perfil de Instagram Circa 70s Interiors ofrece una visión única de cómo los sofás modulares se exploraban en la década de los setenta. Desde diseños extravagantes como la Pleasure Island de Aaron Donner, con una cama de agua que incorporaba un centro de ocio, hasta propuestas como Safari de Archizoom, un sofá modular circular, estos ejemplos muestran la búsqueda de usabilidad y comodidad en el corazón del hogar.
La mudanza permanente: un reto contemporáneo
La creciente dificultad para encontrar viviendas estables ha llevado a un aumento en las mudanzas, donde el mobiliario se ha convertido en un lujo. La necesidad de muebles ligeros y fáciles de transportar ha elevado la demanda de sofás modulares. Estos ofrecen la promesa de adaptarse a nuevas condiciones espaciales y son diseñados para reconfigurar su posición con facilidad.
